Mingob defiende accionar policial tras disturbios en Izabal en rechazo a proyecto minero

Tensión, enfrentamientos y preocupación marcaron la noche del pasado miércoles en Río Dulce, Livingston, Izabal, luego de que más de 50 comunidades expresaran su rechazo a un proyecto minero en la zona de la Sierra Santa Cruz, al considerar que amenaza el abastecimiento de agua y el entorno ambiental.

Publicidad

Según el Ministerio de Gobernación (Mingob), los disturbios fueron consecuencia de una mesa de diálogo entre representantes comunitarios y autoridades del Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (MARN).

El Ministerio indicó que, pese a los esfuerzos por priorizar el diálogo, fue necesaria la intervención de fuerzas especiales de la Policía Nacional Civil (PNC) ante la retención del viceministro de Ambiente, José Rodrigo Rodas, por parte de los manifestantes.

Durante el operativo para liberar al funcionario, la PNC utilizó gas lacrimógeno, lo que intensificó el descontento entre los presentes. El incidente dejó al menos cinco personas heridas, entre ellos el hijo de un reportero que fue impactado en la frente por una granada de gas. Todos fueron trasladados a centros asistenciales.

El Mingob, a través de un comunicado, afirmó que la actuación policial se realizó conforme al nuevo protocolo de intervención aprobado por la Corte de Constitucionalidad, y que se respetó el derecho de reunión y manifestación, haciendo uso proporcional de la fuerza.

Por su parte, el MARN confirmó que mantiene abierta la vía del diálogo y que una nueva reunión está programada para el 30 de julio para informar a los pobladores sobre el avance en los procesos administrativos relacionados con las licencias ambientales otorgadas en 2023. Mientras tanto, el kilómetro 279 de la ruta CA-13 continúa bloqueado desde el pasado 16 de junio.

Las autoridades han advertido que las pérdidas económicas por el conflicto ya ascienden a millones de quetzales, y podrían aumentar si no se logra una solución pacífica a corto plazo.