Por la variante Ómicron, EE.UU. endurece restricciones para viajeros

En estos próximos días, Estados Unidos adoptará medidas para endurecer los controles y requerimientos para las personas que se dirigen hacia el territorio con el fin de mitigar la propagación de la variante Ómicron de COVID-19.

Y es que, el martes pasado, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) dieron a conocer que, desde la administración de Joe Biden, ya trabajan para requerir que todas las personas que lleguen por vía aérea al país se realicen pruebas de COVID-19 en las 24 horas previas a abordar sus vuelos, estén vacunadas o no.

Así lo informó la agencia: «Los CDC están trabajando para modificar su actual Orden Global de Análisis para viajes mientras aprendemos más sobre la variante Ómicron; una orden modificada reduciría el periodo para hacerse las pruebas diagnósticas requeridas a todos los viajantes internacionales por vía aérea a un día antes de su salida hacia Estados Unidos».

Ahora mismo, tanto los CDC como el gobierno nacional estadounidense se encuentran ultimando los detalles de los protocolos precisos que se estarán aplicando y, según lo señalado, serán presentadas por Biden en su discurso de mañana, jueves.

Anticipando de qué se tratará, y en un intento por tranquilizar a la población sobre la presencia de la nueva variante, Biden aseguró que en esas declaraciones estará «presentando una estrategia detallada en la que se delinee cómo vamos a combatir al COVID este invierno, no con encierros ni confinamientos, sino con vacunaciones a gran escala, refuerzos, pruebas diagnósticas y más».

Sin embargo, por declaraciones de fuentes anónimas, se indicó que el Gobierno está estudiando la exigir a los viajeros por vía aérea que se sometan a otra prueba en un plazo de tres a cinco días después de su llegada al país, dijeron las autoridades y barajan una «cuarentena posterior al viaje para cualquier viajero no vacunado».

Actualmente, los CDC recomiendan que se realicen pruebas diagnósticas entre tres y cinco días después de llegar a Estados Unidos desde el extranjero, así como el aislamiento de viajantes no inmunizados, aunque el cumplimiento es voluntario y se cree que pocos lo realizan.