Trump impone aranceles a islas desiertas: ¿impuestos para pingüinos?

En una decisión que ha generado tanto asombro como burlas a nivel internacional, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la aplicación de aranceles recíprocos del 10% a productos importados desde decenas de países y territorios, incluyendo algunos inhabitados por seres humanos, como las islas Heard y McDonald, un remoto archipiélago bajo soberanía australiana en el océano Índico.

Publicidad

La medida forma parte de una estrategia más amplia de revisión comercial impulsada por el mandatario, que busca “restablecer el equilibrio en el comercio global”. Sin embargo, la decisión de incluir territorios deshabitados en la lista de naciones sujetas a impuestos ha generado incredulidad.

Estas islas, que no cuentan con residentes ni actividad comercial conocida, son reconocidas como reserva natural y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, debido a su biodiversidad, incluyendo pingüinos rey, focas antárticas y aves marinas.

La noticia ha desatado una ola de memes y comentarios irónicos en redes sociales, donde muchos se preguntan si ahora las focas deberán registrar sus exportaciones o si los pingüinos tendrán que declarar ingresos.

Aunque el impacto económico de esta medida sobre las islas Heard y McDonald es nulo, el anuncio ha abierto un debate sobre la coherencia de la política comercial estadounidense y la aparente falta de análisis en algunos decretos recientes.