¿Quién es la monja que rompió el protocolo y se despidió del papa Francisco?

En una escena profundamente emotiva que ha recorrido el mundo entero, la monja Genevieve Jeanningros rompió el protocolo y se acercó al féretro del papa Francisco en la Basílica de San Pedro, en el Vaticano.

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Con una mochila verde y un pañuelo en la mano, se secó las lágrimas mientras se despedía de quien fue más que un pontífice: su amigo y guía espiritual.

La muerte del papa Francisco el pasado lunes 21 de abril ha generado miles de reacciones, pero pocas tan humanas y simbólicas como la de Genevieve.

En medio del ritual solemne del Vaticano, la religiosa de aspecto frágil superó el cordón de seguridad e incluso la resistencia inicial de los diáconos. Los gendarmes, al reconocerla, permitieron su paso y la escoltaron hasta el ataúd, donde se le permitió quedarse unos momentos para decir adiós.

¿Quién es Genevieve Jeanningros?

Genevieve Jeanningros, a quien el Papa llamaba cariñosamente «la niña terrible» por su mirada vivaz y sus ojos azules, mantenía una estrecha relación con él.

Cada miércoles asistía a las audiencias generales junto al padre Andrea Conocchia en el Aula Pablo VI. Su presencia siempre emocionaba al pontífice y a quienes la conocían.

Miembro de las Hermanas de Jesús, Genevieve vive desde hace décadas en una caravana en un parque de atracciones en Ostia, cerca de Roma. Junto a otra monja, dedica su vida a servir a los marginados: personas pobres, trabajadoras sexuales, transexuales y comunidades circenses.

Con información de TV Azteca.

Genevieve Jeanningros, la monja amiga del Papa, llora ante su féretro https://t.co/A1AJ2oFYKi pic.twitter.com/rviK1UGY40

— Europa Press TV (@europapress_tv) April 23, 2025